Estela La biografia de estela de Carlotto - Javier Folco - Marea

La vida y la lucha de Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, en sus palabras, las de sus hijos y de la gente que la acompañó en el camino de memoria, verdad y justicia. Un trayecto que la llevó finalmente a encontrar a su nieto luego de 36 años de búsqueda y de 113 nietos hallados hasta ese momento gracias al trabajo de la asociación que preside.

Javier Folco narra en este libro la vida de una mujer extraordinaria, conocida en el mundo entero por su trabajo de recuperación de los niños secuestrados por la última dictadura militar argentina. Estela Barnes de Carlotto no necesita presentación, su trabajo al frente de la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo es un emblema de la lucha contra el autoritarismo y a favor de la vida.


Sin embargo, Folco va más allá, nos revela la persona detrás de la imagen pública. Nacida en 1930, en medio del primer golpe militar a la democracia argentina, Estela cumplió con las expectativas de la época para una chica de clase media: docencia, casamiento, cuatro hijos, antiperonismo y trabajo duro. El secuestro y asesinato de su hija Laura en 1978 alumbraron a la luchadora por los derechos humanos. Su vida daba un vuelco definitivo: su hija había muerto después de haber parido un bebé durante su cautiverio. Desde entonces, todos sus esfuerzos se dirigirían a encontrar ese nieto robado.


Y no solo a él. Eran cientos las familias que habían sufrido lo mismo. Esa idea de trabajo colectivo, de búsqueda conjunta, pero también de felicidad compartida al recuperar a un nieto, sin importar de quién fuera, es lo que Estela subraya permanentemente. Ella no está sola.

Javier Folco ha logrado mostrar una Estela menos conocida, a partir de la síntesis de las visiones que de ella tienen sus hijos y el resultado es un conjunto de escenas intimistas, un relato próximo y realmente sorprendente que demuestra, una vez más, la capacidad de transformación que tienen algunos seres humanos, catalogados como excepcionales.
-Del prólogo de Baltasar Garzón.